PAGINA PRINCIPAL

jueves, 3 de octubre de 2024

MI CARTA TRES MIL CUATROCIENTOS CINCUENTA Y CUATRO A DIOS

 


Buenas tardes mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 3454.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si mes esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de todas nuestras peticiones. Dios de mi vida en tus manos encomiendo a la señor Juliana Gómez Pineda, la exnovia de mi hijo Andrés y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que toda la maldad que existe en su mente y en su corazón no puedan volver a tocar de ninguna forma a mi hijo menor Andrés, para que sus malos deseos en contra de mi hijo no se hagan realidad nunca mas y para que ella desaparezca para siempre de la vida de mi hijo de la misma manera en la que un día apareció. Eso solo será posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor en tus manos encomiendo al señor Juan José Gómez Berrio, el ex mejor amigo de mi hijo Andrés y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que toda la maldad que existe en su mente y en su corazón no puedan volver a tocar de ninguna forma a mi hijo menor Andrés, para que sus malos deseos en contra de mi hijo no se hagan realidad nunca más y para que el desaparezca para siempre de la vida de mi hijo de la misma manera en la que un día apareció. Eso solo será posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo en tus manos encomiendo al señor Epson el ex amigo de mi hijo Andrés y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que toda la maldad que existe en su mente y en su corazón no puedan volver a tocar de ninguna forma a mi hijo menor Andrés, para que sus malos deseos en contra de mi hijo no se hagan realidad nunca más y para que el desaparezca para siempre de la vida de mi hijo de la misma manera en la que un día apareció. Eso solo será posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón en tus manos encomiendo al señor Brom el ex amigo de mi hijo Andrés y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que toda la maldad que existe en su mente y en su corazón no puedan volver a tocar de ninguna forma a mi hijo menor Andrés, para que sus malos deseos en contra de mi hijo no se hagan realidad nunca más y para que el desaparezca para siempre de la vida de mi hijo de la misma manera en la que un día apareció. Eso solo será posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario