PAGINA PRINCIPAL

lunes, 9 de septiembre de 2024

MI CARTA TRES MIL CUATROCIENTOS TREINTA A DIOS

 


Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 3430.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si mes esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte tantas cosas. Te digo todo esto por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, tú eres el único que sabe todo lo que hay en mi mente y en mi corazón. El único que realmente conoce cual es mi situación económica, las angustias que paso pensando en que quizá yo no sea capaz de sostener a mis hijos ni de ayudarlos como ellos necesitan. Tú sabes que hago lo que sea para suplir las necesidades de este hogar y también las necesidades de mis hijos y sabes también que a todos yo les he quedado mal.

Hoy quiero levantar mis ojos hacia ti, alzar mis manos para pedirte que, si es esa tu santísima voluntad por favor no me abandones, para pedirte que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me abras las puertas de la economía para poder apoyar de manera integral a mis hijos y así lograr, gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo, que mis hijos no se desesperen por falta de recursos económicos. Te suplico que me ayudes por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, en tus manos encomiendo la consecución del dinero para pagar la renta de Andrés, para pagar la renta de Johana, para pagar la renta de nosotros aquí, para sostener el alimento de mis hijos Andrés y Johana y sostener el alimento de nosotros aquí, de mi esposo, de mis animales y de mi misma y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempr3e, por siempre y para siempre, para que yo pueda conseguir ese dinero que todos necesitamos gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, en tus manos encomiendo la consecución del dinero para pagar la universidad de Andrés y todo lo que le debo a mi hija Johana, y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que yo pueda conseguir ese dinero que tanto estoy necesitando gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario