Buenos días mi Diosito
adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta
número 3397.
Pero antes que nada quiero
decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI
CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER
LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida,
gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias
por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las
fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de
las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados
que he cometido hasta hoy.
Y también quiero
suplicarte que, si mes esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros
corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros
larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de
mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar
esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de todas nuestras
peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo a mi hijo mayor Fabián y te
suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu
amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por
siempre y para siempre, para que su vida sea feliz y duradera, para que la
salud de su cuerpo, de su mente y de su espíritu se mantenga fuerte y sin
quebrantos, para que él pueda dejar atrás todo lo que le atormente, para que el
recupere la relación con sus hermanos y todos puedan vivir mas tranquilos, para
que todo le salga maravillosamente bien gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor
Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios de mi amor, en tus
manos encomiendo a mi hijo menor Andrés, y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy,
mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que su vida sea feliz y
duradera, para que la salud de su cuerpo, de su mente y de su espíritu se recupere
totalmente y se mantenga fuerte y sin quebrantos, para que él pueda dejar atrás
todo lo que le atormente, para que el recupere la relación con sus hermanos y
todos puedan vivir más tranquilos, para que todo le salga maravillosamente bien
gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor
y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo en tus
manos encomiendo a mi hija menor Johana, y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy,
mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que su vida sea feliz y
duradera, para que la salud de su cuerpo, de su mente y de su se mantenga
fuerte y sin quebrantos, para que ella pueda dejar atrás todo lo que le
atormente, para que ella recupere la relación con sus hermanos y todos puedan
vivir más tranquilos, para que todo le salga maravillosamente bien gracias a ti
y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado,
gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor. Hasta mañana.
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