Buenos
días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo
para ti, la carta número 3356.
Pero
antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA
PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL
ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias
por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo
día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo
con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo,
te amo, mi amor.
Y
para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón
por todos los pecados que he cometido hasta hoy.
Y
también quiero suplicarte que, si mes esa tu santísima voluntad, además de
llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a
todos nosotros larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico
por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios
de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma,
hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de
todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy inmensas gracias,
mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, casi todos los días yo te estoy
suplicando que, si es esa tu santísima voluntad, por favor permitas que mi hijo
menor se acuerde de mí. Pero hoy quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor permitas que mi hijo menor me perdone por todas las ausencias que yo
tuve para con el cuando era un niño. Que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor me perdones por haberme separado de su papa siendo el solo un bebe y dejarlo
sin un hogar estable a causa de todas las peleas y diferencias que tuve con su
papa y que no supe como resolver. Eso solo será posible gracias a ti y solo a ti
mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi
adorado padre celestial.
Dios
de mi amor, yo te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor
permitas que mi hijo menor me perdone por no haberle proporcionado un espacio
seguro, un ambiente bonito y una buena economía cuando el era un niño. Que me
perdone por las veces que salí a conseguir el dinero para mantenerlos sin importar
que muchas de esas veces hice cosas de las que me arrepiento solamente por
tener con que darles todo lo que mis hijos necesitaban y los dejaba mucho
tiempo solos o al cuidado de personas que al final no resultaban confiables.
Eso solo será posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo.
Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios
de mi cielo, yo te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor permitas
que mi hijo menor me perdone por haberle presentado a un padrastro cuando el era
muy pequeño, por no haberlos protegido suficientemente de ese padrastro durante
el tiempo que él vivió en nuestra casa y por haber permitido que ese padrastro
los castigara sin defenderlos como yo debía. Creo que eso es algo que l nunca
me ha perdonado y que lo marco negativamente para toda su existencia. El que el
me perdone solo será posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo.
Te lo suplico por tu amor y te doy inmensas gracias, mi adorado padre
celestial.
Te
amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario