Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2912.
Pero antes que
nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA
DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR
DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la
vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias
por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las
fuerzas de mi corazón. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir
con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los
pecados que he cometido hasta hoy.
Y también quiero
suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros
corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros
larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi
vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy
quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas el destino de todas
nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado
padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo mi búsqueda de empleo
esta semana. Mi estudio de la contabilidad para poder presentar el examen y
solicitar el empleo en la página del gobierno y la maximización de mi tiempo
para no perderlo más y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor bendigas todas estas cosas con tu inmenso amor, en este momento, hoy, mañana
y siempre, por siempre y para siempre para que yo tenga el éxito que tú me
permitas gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico
por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi
amor, en tus manos encomiendo todas las promesas que te hice y te suplico que,
si es esa tu santísima voluntad, por favor las bendigas con tu amor, compañía y
protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre
para que yo La pueda cumplir a cabalidad gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor
Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios de mi
cielo, en tus manos encomiendo la salud mental de mi hijo menor Andrés y te
suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu
amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por
siempre y para siempre para que esa salud nunca se pierda, para que se fortalezca
cada día y para que se mantenga fuerte y excelentemente bien gracias a ti y
solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial. Dios de mi corazón en tus manos encomiendo la vida
y la salud de mis tres hijos, sus parejas, sus hijos y sus padres y te suplico
que, si es esa tu santísima voluntad, por favor las bendigas con tu amor, compañía
y protección en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre
para que siempre conserven su vida y una excelente salud, gracias a ti y solo a
ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito
adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario