PAGINA PRINCIPAL

sábado, 21 de enero de 2023

MI CARTA DOS MIL OCHOCIENTOS TREINTA Y TRES A DIOS



Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2833.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón, gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte tantas cosas. Te las digo por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, toda la vida me la paso pidiéndote cosas, todos los días, cada día, a cada instante te estoy molestando con tantos y tantos problemas que tengo personalmente, con los problemas de mis hijos, con los de mis hermanos y hermanas, con los de todos nosotros tus hijos alrededor del mundo entero y hoy solo quiero decirte, primero que nada, que te amo con todas las fuerzas de mi corazón y que sin ti mi vida no tiene ningún sentido.

Dios de mi amor, lo siguiente que quiero decirte es que, en tus manos encomiendo mi vida, la vida de mis hijos, la vida de mis hermanos y hermanas, sobrinos, la vida de todos nuestros animales, la vida de mi esposo y su familia y la vida de todos nosotros tus hijos alrededor del mundo entero. Te entrego nuestra vida para que en ella se haga solo tu santísima voluntad, y no la nuestra.

Dios de mi cielo, tú eres el único que sabe cuál es nuestro destino, el único que sabe cómo, cuándo y dónde todas las cosas pasaran porque tú eres nuestro señor y creador. Hoy quiero agradecerte inmensamente porque nuestra vida fue, es y será maravillosa gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Quiero decirte gracias por ser tan benévolo con nosotros, por perdonarnos a pesar de que hacemos tu trabajo tan difícil, por olvidar nuestras ofensas a pesar de que cada día te herimos con nuestro mal comportamiento.

Dios de mi corazón, hoy quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me perdones por pedirte tantas cosas, cosas que yo creo que son las que necesito, olvidando que tú eres quien sabe lo que en realidad yo necesito. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial. Dios de mi alma, gracias por amarnos, gracias por protegernos y gracias por guiarnos por el camino que tú sabes todos debemos seguir. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario