Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2682.
Pero antes que nada quiero decirte
gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR
SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida, gracias por la
salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón.
Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi
adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de las tantas
promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido
hasta hoy.
Y también quiero suplicarte que, si es
esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y
puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física,
mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de
mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para
decirte gracias. Dios de mi vida, gracias por tu inmenso amor, por ese amor que
nos regalas a todos nosotros tus hijos alrededor del universo entero a cada
instante, cada minuto, cada hora, cada día, todos los días. Te lo agradezco por
tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi amor, yo te agradezco con
todo mi corazón por bendecirme con el don de la fe, por enseñarme a recibir ese
don y usar ese don para creer ciegamente en ti. Te lo agradezco por tu inmenso
amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, yo te agradezco con
todo mi corazón por tu bondad y tu paciencia para conmigo, por perdonarme cada vez
que caigo en la desesperación olvidándome de practicar el don de la fe que me
regalaste desde que naci y que me demoré tanto para conocer. Te lo agradezco
por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi corazón, yo te agradezco con
todo mi corazón por hacerme un poco más fuerte cada día que pasa, mas fuerte en
mi fe en ti, mas fuerte en mi amor por ti, mas fuerte para esperar por tus
milagros, más fuerte para dejar en tus sagradas manos todo sabiendo que tu
estas en control y que no permitirás que nada malo nos pase a ninguno de
nosotros tus hijos. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre
celestial.
Dios de mi alma, yo te agradezco con
todo mi corazón por enseñarme que no debo ser como santo tomas que, hasta no ver
no creer, por enseñarme que debo dejar solo a mi hijo en este proceso tan duro
por el que está pasando, porque el no está solo, el te tiene a ti, de la misma
manera que yo te tengo y tu estas obrando los milagros en el y ese milagro lo
podremos ver y palpar cuando, como y donde sea tu santísima voluntad que
nosotros los veamos. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre
celestial.
Dios de mi vida, gracias por responder
a nuestras suplicas con tanta prontitud. Te lo agradezco por tu inmenso amor y
te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me perdones por
tantas caídas y perdones a mi hijo Andrés por sus errores. Te lo suplico por tu
inmenso amor mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo
lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario