Buenos días mi Diosito adorado, hoy
estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2610.
Pero antes que nada quiero decirte
gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR
SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA
TUYA.
Gracias por la vida, gracias por la
salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi
corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi
corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de las tantas
promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he
cometido hasta hoy.
Y también quiero suplicarte que, si es
esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y
puro amor, por favor nos regales a todos nosotros, larga vida y salud, física,
mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado
padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios
de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta
para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco con todo mi corazón por
ayudarnos a dejar atrás todas esas semanas de zozobra y dolor que
experimentamos mis hijos y yo hasta hace poco. Solo tú puedes lograr que todos
esos momentos oscuros se conviertan en días de luz y de esperanza. Te lo
agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi amor, yo te agradezco con
todo mi corazón, por el enorme milagro que nos hiciste al liberar a mi hijo
menor de las garras de la adición y de la perdición de su mente y de su cuerpo.
Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, yo te agradezco con
todo mi corazón por cambiar en mi todo aquello que me ataba a un mundo de
dolor, de desconfianza, de esfuerzos vanos, de gasto de energía sin sentido. Te
lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi corazón yo te agradezco con
el alma, por no de permitir que la oscuridad se apoderara de la vida de mi
hijo, por mostrarle la luz y el buen camino cuando ya sentía que su mundo se
había terminado, gracias por cambiar su manera de pensar, su manera de vivir y
gracias por regalarle sentido a su maravillosa vida en tu inmenso amor. Te lo
agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi alma, yo te agradezco con
todo mi corazón por haberle devuelto la vida a mi hijo, por bendecirlo con el
enorme milagro de cambiar su percepción de la vida y sus acciones. Te lo
agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida,
gracias, gracias, gracias, mil gracias, muchísimas gracias por amarnos tanto,
por perdonarnos siempre y por nunca abandonarnos. Te lo a gradezco por tu
inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi amor, gracias por ser la
voz de nuestra conciencia y permitirnos escuchar esa voz y ser mejores cada día.
Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por
todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario