Buenos días mi Diosito
adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta
número 3424.
Pero antes que nada quiero
decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI
CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER
LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida,
gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias
por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las
fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de
las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados
que he cometido hasta hoy.
Y también quiero
suplicarte que, si mes esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros
corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros
larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de
mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar
esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de todas nuestras
peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida en tus manos encomiendo esta semana de trabajo que gracias a ti
y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo comienza y te suplico que, si es esa
tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección,
en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que
esta semana este completamente protegida por tu amor y bendiciones gracias a ti
y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial.
Dios de mi amor, en tus
manos encomiendo en soporte económico que debo darles a mis hijos y te suplico
que, si es esa tu Santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor,
compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y
para siempre, para que ese soporte económico esté total y completamente bendecido,
para que nunca me falte gracias a ti y solo a ti mi amadísimo Señor Jesucristo.
Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, en tus
manos encomiendo la consecución de los dineros qué necesitamos para pagar todas
nuestras obligaciones en este país, en Colombia y ahora en Buenos aires y te
suplico que, si es esa tu Santísima voluntad, por favor los bendigas con tu
amor, compañía y protección en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre
y para siempre para nunca nos falten esos dineros gracias a ti y solo a ti mi amadísimo
Señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios de mi corazón, en tus
manos encomiendo nuestra estabilidad económica y te suplico que, si es esa tu
Santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección,
en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre para que
nunca nos falte esa estabilidad gracias a ti y solo a ti mi amadísimo Señor
Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado, gracias por tanto amor. Hasta Mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario