Buenos días mi Diosito
adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta
número 3405.
Pero antes que nada quiero
decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI
CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER
LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida,
gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias
por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las
fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de
las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados
que he cometido hasta hoy.
Y también quiero
suplicarte que, si mes esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros
corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros
larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de
mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar
esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, te agradezco con todo mi
corazón por la oportunidad que le brindas a mi hijo menor para viajar a otro país
en busca de su tranquilidad. Eso solo puede ser posible gracias a ti y solo a
ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi
adorado padre celestial.
Dios de mi amor, yo te
agradezco con todo mi corazón por brindarles a mis hijos la oportunidad de
reencontrarse, de compartir, aunque sea unas horas juntos. Eso solo ha sido
posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco
por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de un cielo, yo te agradezco
con todo mi corazón por ayudarme a pasar los momentos de desesperación y de estrés,
por tomarme de la mano y sacarme del lodo cuando caigo en él. Eso solo es
posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco
por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi corazón, yo te
agradezco con todo mi corazón por permitirme salir de mis pensamientos negativos,
terminar el llanto y convertirlo en risas, ser feliz a pesar de los pesares y levantarme
después de caer gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo
agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi alma, yo te
agradezco con todo mi corazón por ayudarme a hacer mi trabajo de la mejor
manera, por ayudarme a enfrentar todas las dificultades y por ayudarme a tratar
de cumplir mejor mis obligaciones. Eso solo es posible gracias a ti y solo a ti
mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado
padre celestial.
Dios de mi vida, gracias
por todo lo que nos regalas cada día, gracias por tu amor, gracias por tu compañía,
gracias por tu protección, gracias por nunca dejarnos solos, gracias por
perdonarnos siempre y gracias por no abandonarnos a pesar de todos nuestros
errores. Eso solo es posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo.
Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado,
gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor. Hasta manana.
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