PAGINA PRINCIPAL

jueves, 6 de junio de 2024

MI CARTA TRES MIL TRESCIENTOS TREINTA Y CINCO A DIOS

 


Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 3335

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo creo que no te he agradecido suficientemente por el enorme milagro que nos hiciste a mi hijo menor y a mi, al haberlo sacado del abismo de las drogas en el que se encontraba y que a veces me enfoco mas en las cosas que el ha olvidado que en decirte gracias, gracias, gracias, mil gracias, muchísimas gracias por haber protegido a mi hijo menor de las fatídicas consecuencias de vivir en ese mundo. Hoy solo quiero decirte que, sin importar si me hijo vuelve a recordarme o no, yo nunca tendré como pagarte por ese enorme e inmerecido milagro que solo fue posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, yo te agradezco con todo mi corazón por curar mis penas del alma, por permitirme salir del dolor y refugiarme en tu amor, por estar ahí, dentro de mi corazón, consolándome y acompañándome a cada segundo de mi existencia para que mi vida sea mejor. Eso solo es posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, yo te agradezco con todo mi corazón por la oportunidad que me brindas cada día de aprender de mis errores para no volver a cometerlos, por hacerme caer en cuenta de mis faltas y por ser la voz de mi conciencia. Sin ti, sin esa voz que me dice como y cuando estoy haciendo las cosas mal, yo seguiría cometiendo mil errores. Eso solo es posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, yo te agradezco con todo mi corazón por ayudarme tanto, por acompañarme siempre, por perdonar de mi todas mis faltas, por cubrir todas mis necesidades, por llenar de gloria mi vida y sobre todas las cosas del mundo, gracias por amarme tanto. Mi vida solo es posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario