Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias
a ti, escribiendo para ti, la carta número 3303.
Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR
TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR
CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos
la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias. Gracias,
gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre
celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero
pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.
Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además
de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas
a todos nosotros larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico
por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón
y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas manos el
destino de todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo a mi hijo Andrés,
sus angustias, sus problemas, sus sufrimientos, las cosas que debe resolver y
que aun no ha resuelto y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor las bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana
y siempre, por siempre y para siempre, para que todas sus angustias y sus
sufrimientos desaparezcan para siempre de su existencia gracias a ti y solo a
ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi
adorado padre celestial.
Dios de mi amor, en tus manos encomiendo todos los problemas que
mi hijo menor tenga y que ni haya podido resolver y te suplico que, si es esa
tu santísima voluntad, por favor los bendiga con tu amor, compañía y protección,
en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que
todos esos problemas se resuelvan prontamente gracias a ti y solo a ti mi amadísimo
señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios de mi corazón en tus manos encomiendo a todas las personas
que estuvieron, estén y estarán en la vida de mi hijo Andrés, que le quieren
hacer daño, que quieren confundir su cabeza con tantas historias que no son
ciertas y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor las bendigas
con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por
siempre y para siempre, para que todas esas personas desaparezcan para siempre
de la vida de mi hijo y que sus palabras mis hijos no las escuche, y sus
acciones mi hijo no las siga y las teorías de tanta maldad no sean escuchadas
por mi hijo nunca mas gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo.
Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Gracias
por tanto amor. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario