PAGINA PRINCIPAL

jueves, 11 de enero de 2024

MI CARTA TRES MIL CIENTO OCHENTA Y OCHO A DIOS

 


Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 3188.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para hacerte tantas promesas. Te prometo todas estas cosas por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, en aras de nunca mas volver a quedarte mal con mis promesas de no pelear y ya que ayer en la noche volví a caer en el mismo error de dejarme llevar mas por mis emociones humanas que por las promesas que te hago, yo quiero hoy, 11 de enero del año 2024 dejar plasmadas en esta carta mis promesas para ti con el deseo sincero de poder cumplirlas a cabalidad gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo.

Dios de mi vida, yo te prometo cambiar absolutamente todo lo que soy, mi manera de hablar, mi manera de ser, te prometo callar mas y tal vez no volver a hablar mas que lo necesario aquí en esta casa. Te lo prometo por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, yo te prometo, a partir de hoy, no hacerle ninguna pregunta a mi esposo, por mas ganas que tenga de hacerla. Te lo prometo por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, yo te prometo, a partir de hoy, nunca mas caer en discusiones con mi hijo menos, diga lo que diga, si me insulta o no, yo simplemente le voy a decir Dios te bendiga y te amo. Te lo prometo por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, yo te prometo que, a partir de hoy, yo jamás volveré a darles consejos a mis hermanos de ninguna clase. Te lo prometo por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi alma, yo te prometo que, a partir de este momento, voy a buscar trabajo con mas ganas esperando en ti encontrarlo cuando sea tu santísima voluntad. Te lo prometo por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, todas estas promesas que hoy te hado te las hago por amor a ti y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor las bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para siempre, para que yo pueda cumplirlas a cabalidad gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Sin tu ayuda yo no soy capaz de hacerlo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor.  Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario