PAGINA PRINCIPAL

sábado, 20 de enero de 2024

MI CARTA TRES MIL CIENTO NOVENTA Y SIETE A DIOS

 


Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 3197.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte tantas cosas. Te digo todo esto por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, hoy estoy aquí, en frente de este computador con la angustia en mi corazón de no haber sido capaz de cumplirte con la promesa de no pelear. Lamento profundamente que esta situación se me haya salido de las manos y que yo no sea capaz de ponerte por encima a ti antes que a la rabia que me producen las palabras que me dice. Te suplico que me perdones por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, necesito tu ayuda, por favor no me dejes, por favor ayúdame a resolver este problema para poder empezar a quedar bien contigo. Por favor ayúdame, por favor no me dejes seguir en esta situación, por favor ayúdame a superar todos los problemas porque sin ti yo no soy capaz de superarlos. Te suplico que me ayudes por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, ven en mi auxilio, ayúdame a mí y ayuda también a mi esposo Guadalupe, Cuídalo, libralo de todo mal y peligro y ayúdanos a los dos a entender que, si no podemos vivir juntos, debemos separarnos en paz. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, es triste escuchar tantas críticas, escuchar que tu no sirves, que tu no valoras, que tu eres desagradecida, que tú no aportas, que eres el peor negocio, me ha colmado la paciencia de una manera que ya no resisto más. Hoy, acudo ante ti para decirte que humanamente he perdido y que en verdad lo siento, porque el perder significa que te quede mal a ti a causa de mis errores humanos. Vengo hasta a ti, para pedirte que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me perdones, que por favor me abraces, que por favor no me dejes, que por favor me ayudes a salir de esto y que por favor no me quites la vida sin que yo tenga la oportunidad de poder mantenerme a mí misma. Te suplico que no dejes de amarme, aunque no merezca que me ames y te suplico que por favor nunca me dejes sola. Te suplico todas estas cosas por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario