Buenos días mi
Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti,
la carta número 3194.
Pero antes que
nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA
DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR
DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la
vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día,
gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con
todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amor, te
amor, mi amor.
Y para cumplir
con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los
pecados que he cometido hasta hoy.
Y también quiero
suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros
corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros
larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida,
Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero
dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco con
todo mi corazón por ayudarme a mantener la calma cuando la angustia me acosa,
por ayudarme incluso a cumplir las promesas que te hago, porque yo sola no soy
capaz. Oh, mi amadísimo señor Jesucristo, gracias por amarme tanto. Sabes que
sin ti yo soy nada, sin ti mi mundo no funciona, si ti nada tiene sentido.
Gracia Dios mio porque me amas tanto y me haces sentir tu inmenso amor cada día,
todos los días. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi
amor, yo te agradezco con todo mi corazón porque ayer fue un día bonito con mi
hijo Andrés, al menos me mando unos mensajes sin insultos, me hablo tranquilo. Eso
solo pudo ser posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te
lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi
cielo, yo te agradezco con todo mi corazón por enseñarme todo lo que se, por
valorarme por quien soy y no por como me veo, por ser el único ser que me ama sin
condiciones, por perdonar en mi todos mis defectos y mis errores y por nunca
cansarte de darme la oportunidad de resarcir esos errores. Eso solo es posible gracias
a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso
amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi corazón,
yo te agradezco con todo mi corazón por la esperanza, por la fe, por la confianza.
Gracias por no permitir que yo decaiga y pierda esa fe que me has regalado y
que me permites conservar y acrecentar cada día un poco más. Te lo agradezco
por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi alma, yo te
agradezco con todo mi corazón por cuidar de mis hijos con tanto amor y ternura,
por librarlos de todo mal y peligro, por ayudarles a estabilizarse en sus
empleos y que les vaya muy bien en esos empleos. Eso solo es posible gracias a
ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso
amor mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito
adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario