PAGINA PRINCIPAL

viernes, 29 de diciembre de 2023

MI CARTA TRES MIL CIENTO SETENTA Y CINCO A DIOS

 


Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 3175.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma hoy, quiero dedicar esta carta para pedirte perdón. Dios de mi vida, yo te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me perdones por todas las cosas malas que hice en mi vida, por las cosas que yo debí hacer y que no hice, por las cosas que dije y por todo lo que yo hice que te lastimo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Quiero que sepas que me arrepiento de todo corazón por mis malas acciones del pasado, del presente y del futuro. Te suplico que me perdones por tu inmenso amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, yo te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me perdones por todo lo malo que yo le hice a mi hija Johana, por todas mis ausencias, por las palabras hirientes que le haya dicho durante su existencia, por las veces que discutí con ella, por las cosas que debí haber hecho por ella y que no hice, por las veces en las que no la protegí como debía protegerla, y por lo que yo haya contribuido para que ella sufriera. Te suplico que me perdones por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Quiero que sepas que me arrepiento de todo corazón por todo lo malo que hice. Te suplico que me perdones por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, yo te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me perdones por todo lo malo que yo le hice a mi hijo Andrés, por todas mis ausencias, por las palabras hirientes que le haya dicho durante su existencia, por las veces que discutí con él, por las cosas que debí haber hecho por él y que no hice, por las veces en las que no lo protegí como debía protegerlo, y por lo que yo haya contribuido para que el sufriera. Quiero que sepas que me arrepiento de todo corazón por todo lo malo que hice.  Te suplico que me perdones por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi corazón, yo te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me perdones por todo lo malo que yo le hice a mi hijo Fabian, por todas mis ausencias, por las palabras hirientes que le haya dicho durante su existencia, por las veces que discutí con él, por las cosas que debí haber hecho por él y que no hice, por las veces en las que no lo protegí como debía protegerlo, y por lo que yo haya contribuido para que el sufriera. Quiero que sepas que me arrepiento de todo corazón por todo lo malo que hice.  Te suplico que me perdones por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario