Buenos
días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo
para ti, la carta número 2948.
Pero
antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA
PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL
ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias
por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día,
gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor.
Y para
cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por
todos los pecados que he cometido hasta hoy.
Y también
quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar
nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos
nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu
amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios
de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma,
hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de
todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi
adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo el cuidado de
la perrita Bella y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo
bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y
siempre, por siempre y para siempre. Para que yo sea capaz de cuidarla como se
debe, para que ella nunca sufra ningún daño, ni corra ningún peligro, ni se
enferme estando a mi cuidado, gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor
Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios
de mi amor, en tus manos encomiendo este trabajo que ahora tengo y te suplico
que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía
y protección, antes, durante y después de que se termine para que yo sea capaz
de realizarlo, que yo tenga la paciencia y la salud necesarias gracias a ti y
solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial.
Dios
de mi cielo, en tus manos encomiendo la adaptación a su nuevo ambiente de mis dos
gatos bebe y panchito y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, este y
todos los días, por siempre y para siempre, para que su adaptación sea rápida y
exitosa gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico
por tu amor y te doy inmensas gracias, mi adorado padre celestial.
Dios
de mi corazón, en tus manos encomiendo la entrega del apartamento en el que vivíamos
y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu
amor, compañía y protección, antes, durante y después de que se termine para
que esa entrega sea exitosa y libre de todo problema, gracias a ti y solo a ti
mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi
adorado padre celestial.
Te
amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario