Buenos días mi
Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti,
la carta número 2.892.
Pero antes que nada quiero
decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI
CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER
LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida, gracias
por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo,
mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas
de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo mi amor.
Y para que cumplir con una de
las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados
que he cometido hasta hoy.
Y también quiero suplicar te
que, si es esa tu Santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con
tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros, larga vida y
salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi
amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar
esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de todas nuestras
peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo la recuperación del
dinero que mi hijo Andrés pago en la universidad para su semestre, y te suplico
que, si es esa tu Santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor,
compañía y protección, para que él pueda recuperar su dinero y terminar su
universidad gracias a ti y solo a ti mi amadísimo Señor Jesucristo. Te lo
suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi amor, en tus manos
encomiendo todos mis miedos, mis temores hacia la tecnología, los aparatos electrónicos,
hasta los televisores. Todos esos miedos que me quedaron después de la cirugía
y que aún no he sido capaz de superar, a pesar de que digo tener fe ciega en ti
y te suplico que, si es esa tu Santísima voluntad, por favor los bendiga con tu
amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, para que
todos esos miedos desaparezcan y yo practique más mi fe en ti que el miedo,
gracias a ti y solo a ti mi amadísimo Señor Jesucristo, te lo suplico por tu
amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, en tus manos
encomiendo la consecución del dinero que necesitamos esta semana para pagar el
arriendo y suplir los gastos semanales y te suplico que, si es esa tu Santísima
voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, para que
sea una realidad gracias a ti y solo a ti mi adorado padre celestial.
Dios de mi corazón, en tus
manos encomiendo el desespero que siento cuando no tengo el dinero para suplir
todas las necesidades y te suplico que, si es esa tu Santísima voluntad, por
favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, para que ese desespero se
convierta en fe. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial. Dios de mi alma, en tus manos encomiendo la instalación y la puesta
y encendido de la nueva televisión que nos permitiste conseguir y te suplico
que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía
y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre y para
siempre, para que nunca le haga ningún daño a mi marcapasos, a mi salud, a la
salud de mi esposo y de mis gatos, gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor
Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Te amo mi
Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario