PAGINA PRINCIPAL

viernes, 17 de febrero de 2023

MI CARTA DOS MIL OCHOCIENTOS SESENTA A DIOS



Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2.860.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco con el alma y con el corazón por haberle permitido a mi hijo menor salir de su cirugía exitosamente. Gracias por acompañarlo a cada instante, gracias por permanecer con él a cada instante, en todo lugar. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, gracias por permitirle a mi hijo menor Andrés, tener la energía suficiente para pasar por ese proceso y salir airoso de él, gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, yo te agradezco con toda el alma por fortalecer mi fe en ti cada día que pasa, por permitirme poner en práctica esa fe por siempre y para siempre. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, yo te agradezco con todo mi corazón porque siempre estas cuidando de todos nosotros tus hijos alrededor del universo entero, gracias porque a través de tus maravillosos cuidados recibidos la inmensidad de tu amor por siempre y para siempre. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi alma, yo te agradezco con el alma, porque me bendices con la valentía para afrontar las dificultades, porque esa valentía proviene de ti, ya que eres tú y solo tu mi amadísimo señor Jesucristo quien en realidad se enfrenta a ellas y las resuelve en mi lugar. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.  Dios de mi vida, yo te agradezco con todo mi corazón por estar pendiente de nuestras necesidades, las del alma, las del cuerpo. Gracias por suplir todas esas necesidades con tanto amor y con tanta devoción, gracias por estar siempre ahí, por no dejarnos ni un instante. Gracias Dios de mi alma, porque sin ti nada, absolutamente nada sería posible. Te agradezco todas estas cosas por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario