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lunes, 14 de noviembre de 2022

MI CARTA DOS MIL SETECIENTOS SESENTA Y CINCO A DIOS



Buenas noches mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2.765.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo mi corazón, gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco con todo mi corazón por poner en mi boca las palabras correctas para hablar con mis hijos como tú quieres que yo hable. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi amor, yo te agradezco con todo mi corazón porque cada día que pasa tú me permites sentir con más fuerza ese tu gran amor, porque haces lo mismo con mis hijos y con todas las personas que me diste para amar en este mundo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, gracias por brindarnos a todos nosotros la maravillosa oportunidad de vivir en un mundo tan hermoso como el que tu creaste. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón yo te agradezco de todo corazón porque me ayudas a reactivar mi esperanza y mi fe en todos esos momentos en los que caigo en el desespero humano de no saber que hacer. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi alma, yo te agradezco con todo mi corazón por esta aquí, junto a mi dándome fuerza, sacándome de los momentos oscuros de dolor, Perdóname por caer en ellos y ayudándome a recobrar la fe en los momentos en los que me falta. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, gracias por no permitir que me caiga, por no permitir que me derrumbe a pesar de recibir constantes acusaciones de cosas que hice, de culpas que tengo, de ser la causante directa de todo lo malo que le pasa a mi hijo. Sabes que eso me duele demasiado y sabes que me arrepiento de todo corazón por la parte de eso que sea cierta. Oh mi adorado padre celestial, gracias por permitirme seguir viviendo y luchando contra este dolor humano que me hace flaquear en mi fe. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

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