PAGINA PRINCIPAL

lunes, 27 de junio de 2022

MI CARTA DOS MIL SEISCIENTOS VEINTICINCO A DIOS



Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2625.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo a mi hijo menor Andrés, su vida, su salud física, mental y espiritual, todas sus angustias y sus penas, sus confusiones y todo lo que tú sabes mi amadísimo señor Jesucristo que le falta a él para salir de la depresión en la que vive, de las drogas o de la situación que solo tu conoces y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, este y todos los días de la maravillosa vida que le permites tener, disfrutar y conservar, por siempre y para siempre. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, en tus manos encomiendo la parte que me corresponde del problema de mi hijo y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, para que yo pueda resistir el hecho de no saber nada de él y que tenga la certeza de que a pesar de no verlo ni hablar con él, él va a estar muy bien, porque tu mi Diosito adorado estas cuidando de él y lo sacaras del lugar en el que se encuentra y será una nueva persona gracias al extraordinario milagro de tu inmenso amor. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, en tus manos encomiendo el viaje de mi hijo mayor, su esposa y sus hijos y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, antes, durante y después de su regreso seguro a su hogar. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, en tus manos encomiendo la vida y la salud de mi h ija menor y su esposo y te duplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor los bendigas con tu amor, compañía y protección, este y todos los días de la maravillosa vida que les permites tener, disfrutar y conservar. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario