PAGINA PRINCIPAL

martes, 26 de abril de 2022

MI CARTA DOS MIL QUINIENTOS SESENTA Y TRES A DIOS



Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2563.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco de todo corazón por tantos y tan enormes milagros que nos has regalado a lo largo de nuestra vida. Solo tu mi adorado padre celestial, puedes crear tantas maravillas en este mundo y puedes lograr lo imposible. Hace como dos semanas me embargaba una gran angustia por la situación inestable por la que estaba atravesando mi hijo menor y tu mi adorado padre celestial, tomaste en tus manos toda esa preocupación y la convertiste en fe, en esa fe que me permitió seguir mis días sabiendo que esa parte oscura de la vida de mi hijo terminaría pronto, gracias a ti y solo a ti mi amadísimo Señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, yo te agradezco con todo mi corazón por tomar en tus manos nuestra vida, por acogernos de la manera que estemos, por perdonar todas nuestras ofensas, por acompañarnos siempre, porque nunca nos sueltas de la mano. Te agradezco todas estas cosas por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, yo te agradezco con todo mi corazón por ayudar al mundo con tanto amor, por cubrirnos con tu manto sagrado de protección, por estar presente siempre, por vivir dentro del corazón de cada ser humano para darnos vida. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, yo te agradezco con el alma por revestir al mundo de valor, por llenar de coraje y valentía a nuestro corazón, por permitirnos vivir sin miedo practicando siempre la fe en ti. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi alma, gracias, gracias, gracias, por estar aquí, junto a mí, haciéndome fuerte, resistente, valiente, porque toda mi fuerza está en tu amor y la valentía me la da el hecho de saber que tú estás conmigo y estarás conmigo por siempre y para siempre. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario