PAGINA PRINCIPAL

viernes, 18 de marzo de 2022

MI CARTA DOS MIL QUINIENTOS VEINTICUATRO A DIOS



Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2524.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, mi corazón, hoy quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco de todo corazón por revestirnos a todos nosotros tus hijos con tu manto sagrado de amor. Con ese manto que nos protege interior y exteriormente, con ese manto que no permite que las cosas malas penetren en nuestra alma. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, yo te agradezco de todo corazón por sostener a tus hijos y ayudarlos a no caer. Gracias por no permitir que caigamos en tentaciones que destruirían todo lo bello y hermoso que tu mi Diosito adorado nos regalas a diario. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, yo te agradezco con todo mi corazón por estar dentro de nuestro corazón para darnos la fuerza que necesitamos para salir de todas las cosas que nos atan a un mundo que no es bueno para nosotros. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, yo te agradezco por amarnos como nos amas, por entendernos como nos entiendes, por tolerarnos como nos toleras y por acompañarnos siempre a pesar de que nos equivocamos tanto. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi alma, yo te agradezco con todo mi corazón por ser mi amor, por ser mi fuerza, por ser mi motivación, por ser todo lo que le da un sentido real a mi existencia. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, gracias por cuidar de mi hijo Andrés, por hacerlo fuerte y resistente, por abrir su mente, su corazón y su razón al entendimiento de todas las cosas que le hacen daño y sobre todo mi adorado padre celestial, gracias por amarlo tanto. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario