Buenos días mi Diosito adorado, hoy
estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2534.
Pero antes que nada quiero decirte
gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR
SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida, gracias por la
salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón.
Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi
adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de las tantas
promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido
hasta hoy.
Y también quiero suplicarte que, si es
esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y
puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física,
mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado
padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de
mi cielo, mi alma y mi corazón, hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus
sagradas manos el destino de todas mis peticiones. Te lo suplico por tu amor y
te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi vida, en tus manos encomiendo el viaje de mi hija Johana y de
su esposo Sebastián y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección, antes, durante y después de
que regresen a su hogar, gracias a ti y solo a ti mi amadísimo Señor Jesucristo.
Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi amor, en tus manos encomiendo
a mi hijo Andrés y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor
lo bendigas con tu amor, compañía y protección, antes, durante y después de que
encuentre su camino hacia la consecución de todo lo que necesita gracias a ti y
solo a ti mi amadísimo Señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, en tus manos
encomiendo todas las ideas de mi hijo menor y te suplico que, si es esa tu santísima
voluntad, por favor las bendigas con tu amor, compañía y protección, para que
esas ideas sean maravillosamente productivas, gracias a ti y solo a ti mi amadísimo
Señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios de mi corazón, en tus manos encomiendo
este y todos los días de nuestra vida y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor los bendigas con tu amor, compañía y protección, para que todos nuestros
días sean maravillosos. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado
padre celestial.
Dios de mi alma, en tus manos
encomiendo todos nuestros sueños, nuestros anhelos, nuestros deseos de cambio,
nuestras esperanzas y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor los bendigas con tu amor, compañía y protección para que se hagan realidad,
gracias a ti y solo a ti mi amadísimo Señor Jesucristo. Te lo suplico por tu
amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por
todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario