PAGINA PRINCIPAL

sábado, 12 de febrero de 2022

MI CARTA DOS MIL CUATROCIENTOS NOVENTA A DIOS



Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2490.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón, gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos regales a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, mi corazón, hoy quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco de todo corazón por estar dentro de nuestros corazones para cuidar de nosotros siempre. Gracias porque a pesar de que nos equivocamos tanto, de que tomamos decisiones que no son las correctas y de que muchas veces te desobedecemos, tu sigues ahí, siempre pendiente de nosotros para salvarnos incluso de todos los peligros a los que libremente nos enfrentamos. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, gracias por convertir todos nuestros temores en fe, por enseñarnos a arriesgarnos a vivir todas las maravillas que tú nos permites vivir con la certeza de que tu mi amadísimo señor Jesucristo, estas y estarás siempre ahí, junto a nosotros para ayudarnos, salvarnos, corregirnos, guiarnos y amarnos. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, gracias por proteger a esos hijos que me diste para amar en este mundo, con tanto amor, ternura y benevolencia. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, gracias, por darme la capacidad de aprender y retener ese aprendizaje de todas esas nuevas cosas que tu mi Diosito adorado me permites aprender a pesar de la edad que ahora tengo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi alma, gracias, gracias, gracias, por este nuevo día, por todos los días que me has regalado en este mundo maravilloso que creaste para todos nosotros tus hijos alrededor del universo entero, por los nuevos días que vendrán para mí y para todos nosotros tus hijos alrededor del mundo entero, gracias a ti y solo a ti mi Diosito adorado. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario