Pero antes que nada quiero decirte gracias,
POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI
PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida, gracias por la
salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón.
Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi
adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de las tantas
promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he
cometido hasta hoy.
Y también quiero suplicarte que, si es
esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y
puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física,
mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado
padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de
mi cielo, mi corazón, hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas
manos el destino de todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos
encomiendo el nuevo empleo de mi esposo Guadalupe y te suplico que, si es esa
tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección,
antes, durante y después de que termine su jornada laboral. Este y todos los días,
por siempre y para siempre. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi
adorado padre celestial.
Dios de mi amor, en tus manos
encomiendo a mi hijo Andrés y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor le des el valor que necesita para afrontar la pérdida de su primo. Te
lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, en tus manos
encomiendo a mi hijo Fabian y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor le regales el empleo que necesita para ajustar sus ingresos. Te lo
suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi corazón, en tus manos
encomiendo a la compañera de vida de mi hijo Fabián, Daniela y te suplico que,
si es esa tu santísima voluntad, por favor la ayudes a entender más a mi hijo y
a ser más solidaria con el cuándo las cosas no están tan bien como ellos
quisieran. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi alma, en tus manos
encomiendo a mi hija Johana y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor bendigas para ella una oportunidad laboral. Te lo suplico por tu amor
y te doy gracias, mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos
encomiendo al compañero de vida de mi hija Johana, Sebastián, y te suplico que,
si es esa tu santísima voluntad, por favor le regales una oportunidad laboral.
Te lo suplico por tu amor y te doy inmensas gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi amor, en tus manos
encomiendo este y todos los días de la maravillosa vida que nos regala tu amor,
y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor los bendigas con
tu amor, compañía y protección, por siempre y para siempre. Te lo suplico por
tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por
todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario