Buenos días mi Diosito adorado, hoy
estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2449.
Pero antes que nada quiero decirte
gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR
SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida, gracias por la
salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón.
Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi
adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de las tantas
promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he
cometido hasta hoy.
Y también quiero suplicarte que, si es
esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y
puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física,
mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado
padre celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de
mi cielo, mi corazón, hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas
manos el destino de todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos
encomiendo el malestar que tengo, y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad,
por favor la bendigas con tu amor, compañía y protección, antes, durante y después
de que desaparezca por completo de mi vida, gracias a ti y solo a ti mi Diosito
adorado.
Dios de mi amor, en tus manos
encomiendo el paseo de mi hijo Andrés, de Juliana y de sus amigos, y te suplico
que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía
y protección, antes, durante y después de su regreso a casa. Te lo suplico por
tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, en tus manos encomiendo
el paseo de mi hijo Fabia, su padre, su compañera sentimental y sus hijos y te
suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu
amor, compañía y protección antes, durante y después de su regreso a casa. Te
lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi corazón, en tus manos
encomiendo el paseo de mi hija Johana, Sebastián y su gatita y te suplico que,
si es esa tu santísima voluntad, por favor lo bendigas con tu amor, compañía y protección,
antes, durante y después de su regreso a casa. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi alma, en tus manos
encomiendo este y todos los días de nuestra maravillosa vida y te suplico que,
si es esa tu santísima voluntad, por favor los bendigas con tu amor, compañía y
protección, por siempre y para siempre. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias,
mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo a todos
los enfermos del mundo y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor las bendigas con tu amor, compañía y protección, antes, durante y después
de que desaparezcan para siempre. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi
adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario