PAGINA PRINCIPAL

lunes, 29 de noviembre de 2021

MI CARTA DOS MIL CUATROCIENTOS QUINCE A DIOS

 


Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2415.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, mi corazón, hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial. Dios de mi amor, en tus manos encomiendo los trabajos que van a realizar en esta casa en el día de hoy y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor los bendigas con tu amor, compañía y protección, antes, durante y después de que los terminen. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi amor, en tus manos encomiendo mi vida y mi salud, la vida de mis animalitos y su salud y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor nos libres de todo mal y peligro antes, durante y después de que los trabajadores se hayan ido. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, en tus manos encomiendo todos mis miedos y mis temores y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me permitas vivir con fe y sin miedo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, en tus manos encomiendo a todas las personas que habitamos esta casa, a las personas que habitan las casas de mi barrio, de mi pueblo, de mi ciudad, de mi país y de todos los países alrededor del mundo entero y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor nos bendigas con tu amor, compañía y protección, este y todos los días de nuestra maravillosa vida, por siempre y para siempre.

Dios de mi alma, en tus manos encomiendo absolutamente todo en mi vida y en la vida de todos los seres que me diste para amar en este mundo y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor nos bendigas con tu amor, compañía y protección este y todos los días de esta vida tan hermosa que nos permites vivir y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor nunca te canses de amarnos como nos amas. Te suplico todas estas cosas por tu inmenso amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario