PAGINA PRINCIPAL

martes, 27 de agosto de 2024

MI CARTA TRES MIL CUATROCIENTOS DIEZ Y SIETE A DIOS

 


Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 3417.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si mes esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, fisica, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta para decirte tantas cosas. Te digo todo esto por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, tu eres mi fuerza, tu eres mi amor, tu eres la luz que ilumina mi alma y mi corazón, sin ti no soy nada, sin ti nada puedo, sin ti, nada tengo. Hoy tengo dentro de mi ser la angustia de no poder ayudar a mi hijo como quisiera, la angustia de quedarles mal a mis hijos, la angustia de no poder sostener a aquellos que aun dependen de mí. Tengo la angustia de saber que estoy en la quiebra y que humanamente no tengo mas pertenencias que mis dos gatos y mi ropa. Tengo la angustia de saber que vivo con un enemigo que me odia, de quien dependo económicamente para casi todo. Tengo la angustia de saber que me siento enferma y que no estoy al cien por ciento con mi energía, pero, aun así, con todas mis angustias, mis quebrantos y todo lo que humanamente me falta, tengo la alegría de saber que tu mi amadísimo señor Jesucristo estas conmigo, que me amas, que nunca me abandonas, aunque yo no sea merecedora de tu amor.

Dios de mi amor, en este momento estoy en un estado de desesperación en el que no se que mas hacer, en un estado en el que no se a quien mas acudir, mi hija ya no me quiere prestar más dinero, o mejor dicho ya no puede, y tiene toda la razón, yo no le he pagado, siempre le he quedado mal. No tengo a nadie más para pedirle dinero prestado. Solo te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me ayudes para no caer en la desesperanza. Te suplico que me perdones por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, aquí estoy, completamente bloqueada sin saber que hacer o a quien acudir y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me ayudes a salir de esta situación. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, contigo lo tengo todo, por favor ayúdame a no olvidarlo. Te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor me ayudes a no perder la fe, a no caer en la desesperanza, a que no me importe si no tengo nada, porque al tenerte a ti, lo tengo todo. Te suplico que me ayudes, que no me dejes caer. Eso solo será posible gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario