Buenos
días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo
para ti, la carta número 3269.
Pero
antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA
PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL
ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias
por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo
día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo
con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo,
te amo, mi amor.
Y
para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón
por todos los pecados que he cometido hasta hoy.
Y
también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de
llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a
todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico
por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios
de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma,
hoy quiero dedicar esta carta para poner en tus sagradas manos el destino de
todas nuestras peticiones. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi
adorado padre celestial. Dios de mi vida, en tus manos encomiendo este empleo
que me has dado y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la
bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y
siempre, por siempre y para siempre, para que yo pueda conservar ese empleo
trabajando desde casa gracias a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo.
Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios
de mi amor, en tus manos encomiendo la consecución de todos los recursos económicos
que todos necesitamos para cubrir todas nuestras necesidades humanas y te
suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor la bendigas con tu
amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y siempre, por siempre
y para siempre, para que podamos conseguirlos gracias a ti y solo a ti mi amadísimo
señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios
de mi cielo, en tus manos encomiendo todos los problemas de salud que nos
aquejan a la humanidad a causa de enfermedades que nosotros nos buscamos por no
cuidarnos como debemos y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por
favor los bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana
y siempre, por siempre y para siempre, para que todos esos problemas
desaparezcan para siempre de nuestra vida gracias a ti y solo a ti mi amadísimo
señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial. Dios de mi corazón, en tus manos encomiendo la salud mental de mi
hijo menor Andrés y te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor
la bendigas con tu amor, compañía y protección, en este momento, hoy, mañana y
siempre, por siempre y para siempre, para que nunca le falte la salud de su
mente, para que el pueda recordar todo lo que haya olvidado y para que cada día
se recupere un poco mas de todo lo que le este molestando en este momento, gracias
a ti y solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo. Te lo suplico por tu amor y te
doy gracias, mi adorado padre celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Gracias por tanto amor. Hasta mañana.
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