Buenas tardes
mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para
ti, la carta número 2865.
Pero antes que
nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA
DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR
DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la
vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día,
gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con
todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te
amo, mi amor.
Y para cumplir
con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los
pecados que he cometido hasta hoy.
Y también
quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar
nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos
nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu
amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi
vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy
quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, hace apenas
unos meses yo me encontraba llorando, desesperada, sumida en la angustia de la
que creo fue una de las peores situaciones en mi vida. Pero hoy, gracias a ti y
solo a ti mi amadísimo señor Jesucristo, habiendo recibido de tus sagradas
manos el enorme milagro de la solución de esa terrible situación, solo quiero
decirte, gracias. Y es que nunca me cansaré de agradecerte mi amadísimo señor
Jesucristo, este milagro maravilloso que nos hiciste a todos nosotros, a mi
hijo menor, a mi misma y a nuestra familia. Te lo agradezco por tu inmenso amor
mi adorado padre celestial.
Dios de mi
amor, como poder agradecerte de la manera que debo si ya no me quedan palabras
para expresarte lo que siente mi corazón por tanto amor y tantos milagros
recibidos de ti durante toda mi vida. No solo los que me has concedido
personalmente, sino los que les has concedido a mis hijos, a mis familiares y a
todos nosotros tus hijos alrededor del universo entero. Te lo agradezco por tu
inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi
cielo, yo te agradezco con todo mi corazón, por el hermoso día de cumpleaños
que le regalaste a mi hija menor, por la recuperación de la cirugía de mi hijo
menor, por el mejoramiento de la economía de nuestra familia y por todos los
favores recibidos de tus sagradas manos y que olvido mencionar en este momento.
Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.
Dios de mi
corazón, yo te agradezco con todo mi corazón por permitirme seguir viviendo,
por brindarme la energía para seguir luchando y porque nunca me permites perder
la esperanza de que cada día será mejor, gracias a tu inmenso amor mi amadísimo
señor Jesucristo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre
celestial.
Te amo mi
Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario