Buenas tardes, mi Dios adorado, hoy
estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2672.
Pero antes que nada quiero decirte
gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR
SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.
Gracias por la vida, gracias por la
salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi
corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi
corazón mi adorado padre celestial. Te amo, te amo, te amo, mi amor.
Y para cumplir con una de las tantas
promesas que te hice quiero pedirte perdón por todos los pecados que he
cometido hasta hoy. Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima
voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por
favor nos concedas a todos nosotros, larga vida y salud, física, mental y
espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre
celestial.
Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios
de mi cielo, Dios de mi corazón y de mi alma, hoy quiero dedicar esta carta
para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco de todo Corazón por
haberme permitido contactarme con personas que le ayudan a mi hijo Andrés. Por
abrirle el corazón a su tío y por ayudarlo a tener la compañía de las personas
que tú sabes que lo aman. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre
celestial. Dios de mi amor, yo te agradezco con todo mi corazón, por abrir
hasta los corazones mas cerrados. Por permitirme entender, tolerar y perdonar
hasta las mas crueles ofensas, por abrir mi entendimiento para que sepa que, tal
vez todo lo que pasa con mis hijos, la manera en la que ellos me tratan y me
hablan, me la tengo totalmente merecida. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi
adorado padre celestial.
Dios de mi cielo, gracias por estar aquí,
junto a mí, por tomar todos nuestros problemas en tus Sagradas manos para que
nosotros podamos descansar. Te agradezco por estar cargándonos mientras atravesamos
este desierto de cosas inciertas y nos lleves por caminos empedrados para
ponernos a salvo. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre
celestial.
Dios de mi corazón, yo te agradezco
infinitamente por ayudar a mi hijo menor a seguir adelante a pesar de sus
adicciones, por ayudarlo a mantenerse fuerte, por no dejarlo caer y por
resistir a su lado todas las recaídas presentes y las recaídas futuras, si es
que las hay. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.
Dios de mi alma, yo te agradezco de
todo corazón por mantener nuestra fe intacta a pesar de todas las dificultades
a las que nos enfrentamos a diario gracias a nuestras malas decisiones. Te lo
agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi vida, yo
te agradezco por el día que ya paso y por la nueva noche que nos permites
vivir, por no dejarnos solos, por no abandonarnos, por amarnos con tanto amor y
sobre todo mi amadísimo señor Jesucristo, te agradezco por perdonarnos tantos y
tan grandes pecados. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre
celestial.
Te amo mi Diosito adorado, gracias por
todo lo que me has dado. Hasta mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario