PAGINA PRINCIPAL

jueves, 9 de septiembre de 2021

MI CARTA DOS MIL TRESCIENTOS TREINTA Y CUATRO A DIOS


 

Buenos días mi Diosito adorado, hoy estoy aquí, únicamente gracias a ti, escribiendo para ti, la carta número 2334.

Pero antes que nada quiero decirte gracias, POR TU INMENSO AMOR, POR TU DIVINA PRESENCIA DENTRO DE MI CORAZÓN, POR SER MI PADRE ADORADO Y POR CONCEDERME EL ENORME HONOR DE SER LLAMADA HIJA TUYA.

Gracias por la vida, gracias por la salud, gracias por regalarnos la luz de un nuevo día, gracias por todo, mi corazón. Gracias, gracias, gracias, mi amor. Te amo con todas las fuerzas de mi corazón mi adorado padre celestial.

Y para cumplir con una de las tantas promesas que te hice, quiero pedirte perdón por todos los pecados que he cometido hasta hoy.

Y también quiero suplicarte que, si es esa tu santísima voluntad, además de llenar nuestros corazones con tu inmenso y puro amor, por favor nos concedas a todos nosotros larga vida y salud, física, mental y espiritual. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi vida, Dios de mi amor, Dios de mi cielo, mi corazón, hoy quiero dedicar esta carta para decirte gracias. Dios de mi vida, yo te agradezco de todo corazón por perdonar mis pecados. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial. Dios de mi amor, a veces llegan a mi memoria los recuerdos de tantos errores cometidos a lo largo de mi vida. Errores de pensamiento, de obra y de omisión. Errores que yo llamo pecados porque fueron en contra de tus sagrados mandamientos. Y aunque yo se que tu ya me los perdonaste y los erradicaste de mi vida para siempre, quiero decirte que, en verdad me arrepiento de todo corazón por todos esos pecados cometidos.

Quiero que sepas que reconozco desde el fondo de mi corazón que todo lo que hice no estuvo bien y que te agradezco con el alma por haberme perdonado, por haber limpiado tanta suciedad que tenia en mi vida y por ayudarme a comenzar a vivir de la manera correcta. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi cielo, te suplico que, si es esa tu santísima voluntad, por favor nunca te canses de perdonarme y nunca te canses de permitirme ser una mejor persona cada día, todos los días. Te lo suplico por tu amor y te doy gracias, mi adorado padre celestial.

Dios de mi corazón, gracias por desaparecer para siempre a esa persona que yo fui, por erradicar de mi mente todos los pensamientos negativos, por sacar de mi boca todas las palabras ofensivas, por destruir dentro de mi corazón todos los sentimientos destructivos y por dirigir mis pasos hacia el sendero que me lleva hasta ti. Te lo agradezco por tu inmenso amor mi adorado padre celestial.

Dios de mi alma, gracias por tanto amor, tu amor es el motor que mueve mi existencia, tu amor en mi corazón es el amor que hace de mi vida un mundo extraordinariamente maravilloso. Gracias Dios de mi vida, porque me permites recibir de tus sagradas manos tantas bondades a través de tu inmenso amor. Te lo agradezco por tu amor mi adorado padre celestial.

Te amo mi Diosito adorado, gracias por todo lo que me has dado. Hasta mañana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario